¿Donde esta el río que se pierde; Esa veta en la piedra; en el mar?.
Claudia me había mandado un mensaje de pocas líneas…:”cuando te quedas solo con tu mente el cuerpo te pide”. Así como una sentencia profética sus palabras en el mail me golpearon detrás de la nuca, tan fuerte que, aun hoy no me repongo. Tan brutal el ahogo y pura su intención, que duele y, cómo apena su amor. A mi.
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