me gusta hablar mal de mi (o
hacerme el antiguo)
lo innegable es
que nunca puede terminar el libro “Cinco” de Chejfec
sincericidio miope tal vez barro
broma y escarnio de mi hacia la mar de telas de redes de interné
e una timba la vida gurí
quedé en la pagina 25 y resbalé
me fui de boca al piso
hecho un coagulo de ser yo
quedé
un bola un mentecato
no me fue posible recuperar el sentido
lo que leí por ultimo decía:
“A veces la llaman por la noche a su casa para avisarle que al día siguiente, si falta a las seis de la mañana, vendrán con la mercadería”.
Y en éstos segundos, en los que tardo poco en escribir, me apura a la memoria el libro gauchesco
Uno de ellos
Porque no tengo dientes que muerdan, canejo modelo, parejo
Pero si la fiereza en el rostro
Jeta y cara para los que me ven
Ay el amor para los que me lean las entrelineas que ni se si digo
Consuelo pa los muertos
Penas pa los con vida, lamentablemente
Estrellas en los ojos ante los espejos de los que se ahogan en ego
(sonrisas).
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